África vive entre guerras, epidemias, hambre y marginación. El resto del mundo se ha desentendido de ese continente, y cuando se acuerda de él es sólo para saquearlo. Qué pinches ingratos somos con nuestra cuna planetaria.
¿Qué le queda a los africanos además de miseria, yacimientos de diamantes vendidos de antemano y virus que se propagan entre bebés y entre ancianos? Les queda la música. Al igual que la especie, la música de este mundo viene de África, y allá permanece. Transita de la aldea rural al asentamiento urbano y de allí a Londres, a París, a Nueva York, al Caribe. Y vuelve, enriquecida por el viaje, y estalla en nuevos acordes.
Si antes no terminamos de matarlos, un día los africanos dominarán el mundo con sus voces y sus ritmos: la hermosura es poderosa.
Senegal: Casa di Mansa
Nigeria: Fela Anikulapo Kuti
Sudáfrica: Ladysmith Black Mambazo
Angola: Bonga
Malí: Ali Farka Touré
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Nuestra cuna es mecida por su música que lejos de dormirnos nos trata de despertar para que miremos lo que se aplasta en cada pequeño paso del hombre pero un gran paso para la humanidad…asía la mierda…
Saludos y Visítame
Creo que el poder de esa música nace de una genuina alegria por la vida. Gracias por compartirla. Ana
Música, sonidos del alma.
Gracias por compartirla.